Cada vez es más común que las marcas de ropa especializadas en training lancen prendas sumamente atractivas con el fin de que nos veamos guapas durante los entrenamientos o carreras.
Sin embargo, cada prenda es distinta y responde a diferentes necesidades dependiendo del tipo de cuerpo y entrenamiento.
Así que en cuanto sientas cierto tipo de incomodidad, checa estás cinco principales señales de que no estás entrenando con la ropa adecuada.
Arde con el roce
En cuanto corres los primeros 100 metros ya sientes ardor; ese raspón incómodo que sabes te dejará rozada, y con mucha incomodidad, y dolor. Evítalo en tus próximos entrenamientos o analiza si lo puedes usar en tu día a día sin que te moleste la fricción al caminar o hacer otra actividad.
Te deja marcas
Sí con el tiempo ves que comienzan a aparecer marcas oscuras en áreas de tu cuerpo donde se acomodan las costuras de tus prendas, es señal de que esa prenda tampoco es adecuada para tu entrenamiento.
Te la acomodas/estiras muy seguido
Se te sube, se te baja, se va hacia un lado y luego al otro. El estar acomodándola para conseguir comodidad implica que estás usando una talla más grande o más pequeña. Recuerda que a veces las medidas de las prendas pueden variar dependiendo el diseño, independientemente de que estés usando la misma marca.
Te ha cortado
Sí en el primer entrenamiento te cortó con alguna de sus costuras, ¡hora de decirle adiós! Por más que te guste lo mejor es que la evites tanto en tu entrenamiento como parte de tu look casual del día, o para andar cómoda en casa.
Te has llenado de salpullido
Las telas con las que se hacen ciertas prendas pueden variar mucho. Algodón, licra, gamuza o nylon, son algunos de los materiales en los que puedes encontrar tus prendas deportivas; sin embargo, no todos ellos podrían significar comodidad y salud para tu piel. Así que sí notas granitos o ronchas extrañas, ojo, puede tener algo que ver con tu sensibilidad ante cierto material.