Las corredoras tenemos unos hábitos muy marcados que, gracias a nuestra experiencia, hemos ido descubierto y modificado de acuerdo a nuestras necesidades. No estamos locas (quizá un poco) pero siempre tenemos que prevenir en la medida en que esté en nuestras posibilidades.
Nosotras no experimentamos con nuestro cuerpo ni con nuestra pasión, es por eso que estos hábitos los llevamos donde quiera que vayamos y nos delatan como corredoras.
- Organización al mil. Cada fin de semana tiene su distancia establecida, cada carrera está planificada con base en nuestras vacaciones o festejos específicos. Y llevamos esta organización más allá de correr. Empezamos a ser ordenadas en la escuela, nuestro trabajo y muchas personas nos felicitan por ser así.
- Adiós desvelos. Habrá ocasiones donde se pueda desvelar, pero si al día siguiente hay carrera o distancia ni lo intentamos. Nuestras horas de descanso son sagradas y también cuentan como parte del entrenamiento.
- Nada de excesos. Ni al entrenar. Entendemos el balance entre una vida divertida llena de fiesta, amigos, salidas y una vida donde entrenar para un maratón es nuestra prioridad. El tener un balance en nuestras vidas nos ayuda a ser más eficientes en cualquier aspecto de nuestra vida.
- Humildes y empáticas. No vamos corriendo demostrándoles que somos las número 1 y haciendo menos a las demás corredoras. Al contrario, en la comunidad de Soy Corredora siempre nos apoyamos para dejar atrás los miedos e inseguridades y poder conquistar los retos más locos.
- Sin morirnos de hambre. Ser fit no significa comer sólo lechuga y brócoli. Podemos tener una dieta balanceada comiendo muchas proteínas, carbohidratos y grasas de acuerdo a nuestro tipo de cuerpo y nuestras necesidades.
- Alegría por la vida. Hay días buenos y otros no tanto. Pero hemos aprendido a lidiar con malas experiencias y siempre buscamos el lado positivo de las cosas.
¿Cuál agregarías tú?