Correr es un vicio y puede ser tan caro o barato como “la viciosa” decida. Pero sin duda, lo más importante es que cueste lo que cueste tu vicio, tus finanzas deben estar bien para sostenerlo. ¿Se puede? ¡Por supuesto! Esto es lo que necesitas:
PLANEA
- Echa un vistazo al calendario anual de carreras y elige cuáles serán tus principales 4.
- Revisa el costo de inscripción (si todavía no lo tiene, revisa el del año pasado para tener un parámetro). Pero no te quedes solo ahí:
2.1 Revisa tu ropa de deporte y que es lo que tendrás que comprar este año acorde a las carreras que piensas correr y el entrenamiento que será necesario para ello.
2.2 Tenis (zapatillas). Kilometraje que llevas en tus tenis de carrera y de entrenamiento (si usas dos) y cuando necesitarás comprar nuevos para la carrera más cercana.
- Si Alguna de las 4 principales carreras será fuera de tu ciudad, necesitas cotizar:
Transporte. En aviones se rumora que los mejores días para buscar boletos son los martes en la tarde/noche. Procura borrar tus «cookies» cada vez que hagas una nueva búsqueda de precios.
Alojamiento. Mientras mayor anticipación, más opciones podrás encontrar tanto en precios, como en alternativas.
Alimentos. Pregunta a quienes ya han viajado a ese lugar, cuanto cuesta comer por ahí. Revisa sitios como Trip Advisor y Yelp. Busca opciones de alimentación sana, ligera y no tan cara con anticipación. No quieres gastar de más, ni enfermarte.
Imprevistos. Por favor, si vas a viajar siempre lleva un dinero extra para imprevistos. Es mejor no usarlo que necesitarlo y no tenerlo contemplado (y usar el horrible tarjetazo). Un 15% del total del costo de tu viaje es buen presupuesto para imprevistos. Si no lo usas ¡genial! Tienes dinero para la siguiente carrera.
- Lujos y Juguetes
Estoy segura que en estos momentos ya sabes que reloj nuevo quieres o que ‘gadget’ te hace ojitos. En esta etapa de planeación decídete por el principal. El que te provoque más deseo. Cotízalo en internet.
- Carreras de impulso.
Sí, esas carreras a las que no tenías pensado inscribirte o que ni siquiera existían. Planea que te “aparecerán” dos de estas al año. Promedia el costo de las carreras de 10K en tu ciudad.
PRESUPUESTA
Con los datos anteriores, ya tienes una buena idea de como será tu año como corredora. Ahora pon esos números en tus gastos mensuales. La meta es integrar los costos del vicio de correr dentro del presupuesto mes a mes para que no se haga pesado, y no comprometas otros gastos.
Vas a ‘calendarizar’ alrededor de las 4 principales carreras del año:
- Ropa. Comprar lo que necesites unas semanas antes de cada evento para que te de tiempo de usarla y acomodarte antes.
- Tenis (zapatillas). Idealmente 4-6 semanas antes de tu competencia para que tengas tiempo de adaptarte a tu nuevo calzado
- Compra de boletos (transporte en caso que aplique). De dos a 4 meses antes. Por ejemplo si la carrera es en octubre, ve ahorrando cada quincena desde marzo y compra tus boletos en agosto.
- Pago de hospedaje. Te recomiendo empieces un fondo de ahorro para el hospedaje desde el momento que decidas a donde irás este año. Puedes también pagar el lugar de alojamiento con anticipación usando los Meses Sin Intereses. Pero cuida no tener muchos MSI al mismo tiempo.
- Imprevistos. Integra en tu presupuesto mensual un ahorro bajito para alcanzar el 15% del total de tu viaje. Si por ejemplo, tu carrera es en octubre y te costará aproximadamente $600USD necesitas ahorrar para imprevistos unos $90USD. Si ahorras $10USD cada mes desde enero a septiembre, tendrás $90 USD.
- Ahora, vas a programar alrededor de tu cumpleaños el lujo o ese gadget de ensueño. Ya sea que algún ser querido pueda regalártelo o que te regalen vales de tu tienda deportiva favorita o incluso dinero para que lo adquieras tu. No hay nada mejor que recibir lo que más deseas en tu cumpleaños.
- Y por último, reserva un dinero para las carreras de impulso. Cada mes guarda un poquito de dinero. Puede ser el 5% de todo tu ingreso mensual para esas cosas donde te gana la emoción.
En las finanzas personales a menudo cometemos el error de no integrar los costos de nuestros gustos y placeres al gasto mensual. Entonces, viene el gasto en exceso y por supuesto, la culpa. Pero ¡nos merecemos correr! ¿Cierto? Absolutamente. Lo que no te mereces es sentirte mal por invertir tiempo y dinero en ello. Un poquito de planeación cambia todo.
¡Felices carreras!
Por Sonia Sánchez-Escuer
@blogylana