Seguro más de una vez te ha pasado que amigos y familiares te han interrogado del por qué correr se ha vuelto tan importante en tu vida, te dicen que tu estilo de vida, por tu rutina de ejercicio y alimentación, es una locura. Sea cual sea tu tiempo practicando este deporte, sabes que una vez que empiezas a correr es imposible dejarlo a un lado.
Es por eso que te dejamos unas señales para averiguar si tu pasión por correr se excede de los normal… ¡En el mejor de los sentidos!
- Tu tema de conversación favorito es el de correr; te sabes de memoria el día de las carreras, su distancia, quiénes son los dueños de las marcas mundiales, los lanzamientos de las marcas deportivas, las mejores rutas, etcétera.
- Tu vida social en fin de semana depende de tu plan de entrenamiento; obviamente tus entrenamientos de distancia están antes de unas cervezas.
- Tus tenis para correr los llevas contigo a cualquier lado “por si las dudas”; nunca sabes cuándo surgirá un tiempo libre para hacerlo. Esto aplica más cuando sales de viaje.
- Te enfocas más en la tecnología y tipo de pisada que el color del calzado; siempre buscas la comodidad y funcionalidad de acuerdo a tus objetivos, ya que sabes que cualquier par de tenis para correr por sí solos son hermosos.
- Vestir ropa formal es un problema ya que tu clóset está lleno de ropa deportiva; siempre deseas que en las juntas de la oficina o en las fiestas pudieras lucir tu conjunto deportivo favorito.
- Tus redes sociales están llenas de imágenes motivacionales y entrenamientos; ya sean tuyas, tus amigos o blogs. Siempre te animan a dar más cada entrenamiento.
- Cuando dicen una dirección calculas mentalmente cuánto tiempo tardarías en llegar hasta allá corriendo; “¿1 hora en automóvil sólo por 5K? ¡Yo haría menos de la mitad corriendo!”
- Tienes más energía al terminar de correr que cuando empezaste; después de pausar tu reloj/app y ponerte a estirar estás dispuesta a correr más.
- El clima no es excusa para hacer tus entrenamientos; ya que siempre estás preparada para una mañana soleada o una noche lluviosa.
- Correr es tu terapia; siempre encuentras esa tranquilidad, la solución a un problema o eliminas ese sentimiento de tristeza y enojo y lo mejor ¡es gratis!
- Cuando terminas una carrera ya estás pensando en la otra; sin importar tu tiempo, siempre estás dispuesta a mejorar.
- Siempre te enfocas en mejorar tus zancadas y tener una adecuada frecuencia cardiaca; ya que sabes que son igual de importantes que el tiempo que haces.
- Tienes un lugar especial para tus números y medallas;
- Romper tus récords hace que sea aún un mejor día; ya que con el simple hecho de ponerte tus tenis y conquistar la pista pintaba para ser un buen día.
- ¡Tú solita te nombraste “La oveja fit de la familia”!
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