Correr implica más que entrenar y ser más rápida para alcanzar un objetivo; disfrutar de hacerlo es clave para mantener la emoción.
Así que sí últimamente has estado muy presionada por tus entrenamientos porque tienes carrera en puerta, relájate y checa estos cinco motivos para entrenar sin ver el reloj y disfrutar de lo que más te gusta: correr.
Corres por amor
Recuerda que lo haces porque es lo que te gusta; lo que te libera, te hace sentir feliz, te llena de emoción y te hace sentir poderosa. Corres por amor a ti, es como un apapacho a tu cuerpo. Deja a un lado la presión esta vez y corre sin voltear a ver los números.
Te enfocarás en cosas importantes
Elige un pensamiento y desarrollalo mientras corres. Si traes un proyecto en mente analízalo, dale forma, proponte ejercicios, si tienes un examen en puerta disfruta de poder repasar los temas mientras tu cuerpo se siente tranquilo y liberado. Una vez que termines no solo habrás corrido, sino, enfocado tu mente en algo importante para ti.
Lo disfrutarás más
Hay momentos para hacer chequeos e ir por tiempos, este NO es uno de ellos. No te presiones si no vas a 6, 5 o 4 el kilómetro. Esta vez no se trata de sacar tu lado más rápido, sino el de una corredora que disfruta de lo que hace sin tener que demostrar nada a nadie.
Te servirá como terapia
Simplemente deja la mente en blanco y dedícate a correr el trail que hayas elegido. Libera tu mente de las presiones del trabajo, conflictos amorosos o problemas familiares. Deja que tus pensamientos fluyan al ritmo de tu trote. Sé consciente de tu respiración, inhala y exhala con paz. Pon en orden todos tus sentimientos.
Te llenará de energía
Al no tener presión alguna, tu cuerpo sentirá que está corriendo como “descanso”, sin deberle nada al tiempo. Date la oportunidad de correr libre y verás cómo la paz y la energía llena de fuerza a tu cuerpo haciéndolo sentir más motivado. Verás la diferencia en tu próximo entrenamiento con chequeo.