Ya se acercan las vacaciones de diciembre y ya empezó el frío, pero no dejes que sea tu pretexto para dejar de correr. Sabemos que en esta época es más difícil despertarte en las mañanas a hacer tu rutina, que las cobijas cobran vida propia y no te dejan ir, o que simplemente ya tienes las vacaciones a la vista y no piensas en nada más que el pavo y un rico ponche. Así que sí lo que hace falta es inspiración, estas son unas razones por las cuales debes seguir corriendo en diciembre.
Quemas hasta un 30% más de calorías. Científicos han demostrado que en la época de invierno quemamos más calorías porque el cuerpo gasta más energía en mantener la temperatura corporal. Lo mejor de todo es que toma esa energía de la grasa acumulada. Así que sí hacemos ejercicio a temperaturas bajas se quemarán las calorías del ejercicio y unas extras para mantener el calor interno y ayudar a que tus órganos funcionen correctamente.
Tendrás un cutis perfecto. Los dermatólogos explican que cuando hace frío como en diciembre los vasos sanguíneos se contraen. Esto hace que llegue menos sangre a la piel y disminuye el aporte de nutrientes y oxígeno, lo que produce una sensación de estiramiento.
Mejorará tu rendimiento. En condiciones extremas o desconocidas el cuerpo tiene que trabajar para adaptarse y estas adaptaciones lo hacen más fuerte, aumenta la capacidad cardíaca, se incrementan los litros totales de sangre y los litros de aire por minuto que somos capaces de respirar.
Te acordarás de la importancia de calentar y estirar. Mantener el cuerpo flexible, ágil y caliente para el ejercicio en invierno evitará que te tuerzas, esguinces u otras lesiones.
Serás más feliz. Cuando el cuerpo trabaja más para mantener la temperatura, la cantidad de endorfinas producidas también se incrementa, dejando una sensación de felicidad, además de la satisfacción de saber que lograste pararte de la cama con este clima.
Tip extra. En invierno lo ideal es vestirse en 3 capas, la primera debe de ser de una tela que expulse el sudor para que no nos quedemos fríos (el algodón no es buena opción porque absorbe el sudor pero deja humedad), la segunda debe ser térmica y la tercera un rompevientos.