Olvida la idea de quedarte en casa y no salir a correr cuando hace frío. Un estudio reciente dice que es mejor que te levantes a ejercitarte.
La tentación de no ir a correr porque hace frío a veces es muy alta, pero las corredoras sabemos que la voluntad es uno de los hábitos que nunca debemos perder y decimos que sí a un entrenamiento congelado.
Un estudio de la Universidad de Albany reveló que hacer ejercicio cuando hace frío (entre 5 y 9ºC) quema un 34% más de calorías en comparación con las consumidas en climas calurosos.
Según la Dra. Cara J. Ocobock, miembro del Departamento de Antropología de la Universidad de Albany y autora del estudio, el frío genera un gasto metabólico más elevado debido a que se necesita más energía para mantener el cuerpo caliente. Pero también comes más, porque cuando vas a la montaña, por ejemplo, el descenso de temperatura de la zona hace que tengas contracciones involuntarias musculares que mejoran el tono y estas contracciones, a su vez, consumen energía que se transforma en calor.
Así que no dejes de entrenar cuando hace frío, no solo vas a quemar más calorías, también mejoras el tono muscular y de peso, puedes comer más.