Correr en pareja, además de divertido puedes resultar muy beneficioso para cumplir con los objetivos que nos planteamos. Cuando tenemos una carrera en mente, empezamos súper entusiastas a entrenar y quizá con el tiempo vayamos perdiendo ese interés. Correr en pareja te hará salir de “tu zona de confort”. Aquí te dejamos las razones para hacerlo:
- Se comprometen. Siempre es más seguro quedar con alguien para ir a correr, porque así no hay forma o pretexto para que digas “lo hago mañana” o “voy más tarde”. El tener un compromiso con alguien, te obligará a levantarte y salir a correr.
- Persiguen un mismo objetivo. Aun cuando sus competencias sean en fechas diferentes, ambas van por un mismo objetivo: mejorar sus tiempos y conquistar esa meta. De esta manera, logran completar sus distancias y cumplir con el plan de entrenamiento al pie de la letra para disfrutar su gran día al máximo.
- Nunca cae la motivación. El compartir kilómetros con alguien más es ameno y divertido, pues no se siente tan pesado el trayecto y el tiempo se te pasa volando. Además, nunca te dejará abandonar, siempre va a estar para ayudarte.
- Fortaleces lazos. Cuando recorremos equis número de kilómetros, pasamos por muchas etapas; yo pienso que el entrenamiento en sí, siempre es como una terapia en movimiento. Al compartir estas distancias con alguien, profundizamos en temas personales y conocemos a nuestra compañera de kms mucho más y viceversa, lo cual nos hace automáticamente, tener un lazo más estrecho con ella. Yo he conocido a mis mejores amigas corriendo.
- Mejorarás tus tiempos. Correr en compañía te obliga a esforzarte más, si tu compañer@ lleva un mejor progreso que el tuyo, comenzarás a aumentar un poco tu velocidad y si es al revés, serás tú quien termine ayudando a tu compañera de carrera.
- Te sentirás segura. Si llegas a caerte o a sentirte mal por cualquier razón, siempre habrá alguien que pueda auxiliarte. O viceversa, si alguna de tus amigas necesitara algo, incluso un hombro o una oreja, ahí estarás para ella.
Ahora ve: