Si vas corriendo y de pronto te da ese «dolor de caballo«, «flato» o «vaso» en la zona del abdomen, que se intensifica de un lado de tu cuerpo, aquí te tenemos la solución.
Por lo regular se debe a que no hay un flujo de sangre suficiente al diafragma que permite controlar la respiración en la carrera, o bien, un exceso de tensión en los ligamentos del diafragma y si tomaste muchos líquidos o comiste demasiado se intensifica. Evita tomar más de 500 ml de líquido antes de hacer ejercicio, no bebas refrescos ni bebidas gaseosas y bájale al consumo de azúcar y sal. Al correr, en los primeros minutos inhala por la nariz y exhala por la boca, después aprende a inhalar y exhalar por la boca de una forma controlada, sin abrirla demasiado ni cerrarla por completo.
1. Si vas corriendo y crees que puedes aguantar, baja el paso y ve expulsando al aire por la boca hasta que desaparezca.
2. Si no aguantas, deténte de inmediato. Agáchate levemente al frente, presiona y da un ligero masaje en la zona. Toma aire y no respires por el pecho, sino por la zona abdominal. Es mejor que camines un poco.
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