1005560_10151571713158557_218143377_n

Mi historia empezó exactamente 3 años atrás, tras haber vivido una fuerte desilusión amorosa, me casaba y de un día a otro todo se vino abajo, claro, lo primero que vino después del tropezón fue una depresión espantosa que no me dejaba comer, dormir y mucho menos pensar con claridad en lo que se venía en el presente.

Tras un mes de no salir para nada de casa, un día mi padre llegó con una membresía a un club deportivo y me dijo: tal vez hacer un poco de ejercicio libere tu mente para poder empezar a construir de nuevo. Jamás olvidaré esas palabras, me levanté de inmediato, me puse un pants, unos tenis y cogí mis llaves decidida a que ese día era el fin de esa tristeza que me invadía y no me dejaba avanzar. Iba diario y podía pasar hasta 2 horas trepada en la caminadora corriendo sin parar, hasta que un día llegó uno de mis entrenadores y me regaló una inscripción a la carrera Nike Nosotras Corremos, la recibí con una cara de angustia terrible, cómo iba yo a corer 10km cuando nunca había corrido ni las cortinas de mi habitación; sin embargo, creía que esta aventura podría darle un nuevo sentido a mi vida, así que sin más decidí a aceptar el reto y me presenté a recoger mi kit en el hipódromo, el ambiente era increíble y vi a tantas mujeres tan alegres  y deportistas que me dije a mi misma, «si ellas pueden también yo».

Obvio me presenté la mañana del domingo muy tempranito y con el peor outfit del mundo, unos tenis que pesaban un mundo y unas licras para antrear y fue así, como entre un mar de corredoras, inicié mis primeros kilómetros, al principio no creí lograrlo pero estaba segura que no sería la última en cruzar la meta, mi tiempo 1:32 minutos nada mal para alguien que ni idea de lo que significaba correr, a partir de ese día mi única objetivo era regresar el siguiente año y hacerlo mejor. Me inscribí ese año a todas las carreras habidas y por haber, empecé a hacerme el buen hábito de entrenar y conocí a increíbles personas que se han ido convertiendo en mis mejores amigos y cómplices en las pistas, hoy a 3 años ya de haber empezado a acumular kilómetros he dejado atrás a la persona que solía ser y me he convertido en un mejor ser humano, levantarme cada mañana para salir a perseguir amaneceres y compartir kilómetros felithes como yo les llamo, hacen mis días muchísimo más brillantes, ¡¡¡correr para mi fue el anzuelo que me rescató del fondo del mar!!!

Hoy día tengo la gran fortuna de ser parte de ser parte de un gran equipo de corredores «Adidas Team» con quienes he aprendido a mejorar mi técnica, a disminuir mis tiempos y compartir cada reto vencido en las pistas con mi nueva familia corredora;  mis Coaches Clara, Meli, Jorge, Chava e Igmar  me han enseñado que correr no solo es un ejercicio … es un estilo de vida.

En octubre primero Dios me gradúo corriendo mi primer maratón en Chicago , y estoy convencida que aquella decepción en mi vida me ha llevado a alcanzar grandes metas personales y profesionales y he comprobado que lo que no te mata…¡¡¡te hace más fuerte!!!

Erika Ochoa