Ni el frío, ni los días grises ni nada te harán dejar de correr. Si tu corazón quiere seguir pero tu mente o cuerpo ya no, es hora de replantearte las cosas. Hay cinco cualidades que Kirk Mango, entrenador, corredor y maestro por más de 32 años en EUA, señala como las más poderosas para mantener la motivación y por lo tanto, convertirte en una corredora de éxito.
– Compromiso. Cuando adquieres el compromiso de llevar a cabo algo es porque estás firmemente decidida a conquistar la meta. Por lo tanto, adoptas una especie de devoción por lo que haces y lo demuestras a través de la consistencia que aplicas en cada esfuerzo en tu entrenamiento. Tu dedicación te forzará a ser la mejor.
– Disciplina. No se trata de un castigo, sino de mantener en tu mente los objetivos que tienes aunque otra cosa te parezca más atractiva que entrenar. A muchas les funciona tener un programa estructurado, lo cual les representa una mayor estabilidad. La disciplina le da valor a lo que haces, en este caso, correr.
– Sacrificio. Es parte de la disciplina. Hay momentos donde no estarás disponible, sobre todo en fiestas o reuniones sociales, pero entenderlo te permitirá disfrutar del momento y aceptar que a todo sacrificio siempre hay una recompensa que alimenta tu alma.
– Prioridades. Una prioridad es algo mucho más importante que cualquier otra cosa. No debes dejar de lado las cosas que o situaciones que te inyectan energía y en donde tu presencia es fundamental. Acuérdate que los periodos de descanso son mucho más importantes para tu alma y cuerpo que una ardua sesión de entrenamiento. Y eso incrementará la satisfacción que saboreas después de correr.
– Corazón. Sí, una corredora es puro corazón. No sólo entrenamos las piernas, el corazón es el que nos hace llegar a una meta. Los grandes atletas tienen mucho de él para darle la cara a situaciones que no les gustan, eso los enaltece y los lleva al éxito. Lo importante no son los problemas, sino la actitud con la que los enfrentas.