Nada grande se ha hecho en el mundo sin una gran pasión. J. dela Bruyere
Quiero compartir esta frase porque queda excelente para platicarles sobre esta gran experiencia. Me gusta contar sobre mis anécdotas corriendo, maratones, carreras, amigos y en esta ocasión sobre un grupo de mujeres que tenemos dos cosas en común, ser latinas viviendo en estados Unidos y compartir una pasión por correr.
Hace 8 meses la vida nos trajo a mi familia a mí a vivir al Estado de Michigan en Estados Unidos, una oportunidad de vida con grandes cambios para todos. Debo decir que extrañé muchas cosas de mi México lindo, mi familia, mis amigos, los lugares, la comida. Pero empecé a disfrutar también de un nuevo y hermoso lugar, conociendo a personas nuevas, comencé a hacer nuevos amigos que me hicieron sentir como en casa.
Sin duda, todo cambio es difícil pero hubo algo que me mantuvo ocupada y fuerte, motivada, sintiendo que todo era posible si me esfuerzo y hablo de correr.
Pronto llegó el invierno lo cual impidió correr por fuera y una vez más, correr me enseñó una lección “debes adecuarte a lo que te toca”, así que aprendí a correr en la banda y disfrutarlo. Fue difícil al inicio, soy de las que ama ver los paisajes, sentir el aire en el rostro, pero poco a poco fui acostumbrándome y hasta el gusto le tomé.
Pero había algo que me hacía falta y era conocer más corredoras, poco a poco fui conociendo amigas apasionadas por correr, Sandra fue la primera, de Colombia, una chica linda y quien pronto se estrenaría en lo que ya fue su primer maratón; también a Xóchitl, mexicana, maratonista, triatleta y motivadora nata, con quien hice click inmediatamente por ser una apasionada por el deporte; Carla y Jaky, muy disciplinadas para entrenar, dos chicas lindísimas que me hicieron sentir que eran mis amigas desde siempre; Yadira, Nancy y no quisiera olvidar a nadie, todas ellas muy lindas. Pero sabía que había más corredoras. Comencé a animar a otras amigas a iniciarse a correr y sentí era necesario unirnos y fue así que se me ocurrió poder hacer un trote para conocernos.
La vida y los tiempos de Dios son perfectos y como bella coincidencia Soy Corredora me propuso armar un grupo para latinas en FB viviendo en USA, para motivarnos a contar nuestras historias y hacer comunidad, gran oportunidad para dar color a esta idea.
26 de abril fue la fecha de reunión, Bloomfield Trail nuestro lugar para conocernos. Llegaron más chicas de las que confirmaron. 23 éramos en total. 23 mujeres que compartíamos dos cosas, ser latinas viviendo en Estados Unidos y apasionadas por correr.
Fue increíble escuchar sus historias, mujeres que se iniciaban en la carrera, mujeres que van en busca de su primer 5k, otras que llevan distancias de 10 y 21 kilómetros, unas más que son maratonistas y hasta ultramaratonistas, mujeres sonrientes, ilusionadas por sus carreras, por sus proyectos, por sus kilómetros. Sin diferencias de número de carreras, o de distancias, mucho menos de medallas, solo mujeres que corremos porque nos gusta, porque lo disfrutamos y que queríamos compartir y conocernos.
Mujeres admirables porque se levantan cada mañana muy temprano para salir a entrenar, otras que lo hacían en gimnasio porque sus tiempos nos les permitían salir, otras que lo realizaban por la tarde y unas más que lo hacían cuando el día lo permitía. Compartimos no solo kilómetros, compartimos sonrisas, motivación y muchas ganas de seguir conociéndonos.
Pudimos hacer comunidad, porque así somos los corredores y los latinos, quedamos de vernos cada mes, conocer más parques e inclusive incluir desayunos después de esos entrenamientos. México, Guatemala y Venezuela, corredoras latinas que nos reunimos un sábado por la mañana para compartir eso que tanto nos apasiona, CORRER.
Ahora ve: