Quiero compartir un poco de mi historia con ustedes. En agosto 2015 me inicié en esto de correr, mi primeros 10 k fueron los mejores, llena de miedo porque no estaba preparada para eso , pero lo logré en 1:10.
Cuando crucé la meta me llené de emoción porque lo logré, lo hice sin nadie más que yo.
Atravesaba por una ruptura, todo mundo me decía que no iba a poder, que solo lo hacía por impresionar, que no tenía condición y mil cosas más, pero el pasado 29 de diciembre de 2015 les he demostrado a todos y a mí misma que esto me encanta, que quiero ir por más.
Lo más importante es que he crecido mucho como persona, ya no tengo tantas inseguridades y miedos, es lógico y muy válido tenerlos, pero hoy los afronto, voy por la vida sin querer rendirme porqué el running me ha enseñado que lo puedes lograr si te lo propones.
Y ahí estoy queriendo más, porque la vida también es ambición. Ahora me preparo para 21k con mucha emoción porque eso también me enseñó el correr, tener sueños y emocionarte por ellos.
Para finalizar un poco, quiero agradecerle a mi ex por haberme enseñado lo que es correr, hoy lo entiendo y dentro de lo malo, cosas buenas llegaron, a mi mama, a mi hermana y a mi mejor amiga, porque siempre están escuchando mis historias y aunque sé que les aburren, están ahí siempre.
A soy corredora por compartir las historias que inspiran. Y a mí siempre a mí, porque no me pienso rendirme y pienso ir por más kilómetros.
No sé exactamente hasta dónde llegaré pero sé que voy por el camino correcto.
María Fernanda Bonilla