Yola Romay es una de esas mujeres que cuando te platica de la montaña, lo hace con tanta emoción que casi te obliga a que en ese momento quieras ponerte unos tenis y salirte a correr a uno de esos lugares que tanto ama. Es corredora trail desde hace 6 años y aquí te vamos a contar su historia.
Yola, como la mayoría de sus amigos la conocen, es psicóloga de profesión y actualmente se desempeña como Gerente de Capital Humano en una empresa dedicada a la hospitalidad, pero tiene su lado artístico, ¡también diseña joyería! Vive en la Ciudad de México y tiene 34 años.
Empezó a correr hace 10 años para estar más cerca de su papá. Una vez que sus padres se divorciaron, ella quería pasar más tiempo con él y fue así como se convirtió en su entrenador y la preparó para cruzar la meta de su primer 21k. A partir de ese momento empezó a enamorarse más de correr y después, las circunstancias cambiaron, su padre y ella ya no pudieron entrenar juntos debido a la distancia tan grande que había entre los lugares donde cada uno vivía, y decidió unirse al equipo de Juan García, un maravilloso entrenador que ya no está con nosotros pero que todos recordamos con mucho cariño y que dirigía el equipo JUANSON.
Entonces Juan la entrenó para correr otro 21k, le fue increíble y tiempo después, se dio cuenta que lo suyo era la montaña al decidir correr un ultramaratón de la Ciudad de México a Tres Marías, en Morelos. «De hecho, cada año hago esa carrera por todo lo que significa para mi», nos comenta. Actualmente forma parte del equipo DROMO y su entrenador es Helder Arellano, el mismo que dirige el Soy Corredora Squad con quien ha trabajado mucho para ser cada vez más experta en carreras trail.
Ser organizada es una de las tantas cualidades que tiene Yola para cumplir con todo. «Me encantaría entrenar todos los días al aire libre pero en esta ciudad y por mi trabajo no tengo tiempo, pero los fines de semana los aprovecho para ir a la montaña, incluso sábado y domingo donde hago mis distancias largas que van desde 25 hasta 50 kilómetros». Sí, como leyeron hasta 50 kilómetros. Yola aprovecha los lugares al aire libre que están cerca de la ciudad de México como el Desierto de Lo Leones, La Pila, El Cerro de San Miguel, para hacer técnica y no solo distancia junto a sus amigos de Aire Libre. «Me encanta descubrir lugares, conectarme con la naturaleza y también me sirve mucho para hacer técnica, hay que aprender a correr de subida y bajada, esquivando piedras, pisando como se debe…».
Yola, quien ha corrido también el Ultramaratón del Caballo Blanco en Chihuahua, UTMX y las 50 millas Tahoe Rim Trail, entre otros, se declara admiradora de Kilian Jornet, ¿y quién no?, si él nos ha enseñado a descubrir paisajes externos e internos al correr ultradistancias y demostrar que se necesita mucha fortaleza mental para lograrlo. Y Yola lo vive cabalmente día a día: «eso es lo bonito de la montaña, que estás en el presente, que te enfrentas a tus demonios con una meditación, y de pronto, hay momentos que ya no piensas nada».
Pero quizá te preguntes como nosotras, con tanto entrenamiento, ¿a qué hora duerme? ¿tiene vida social? ¿le dará tiempo de comer bien?. Y la respuesta fue sí. «Duermo 7 horas y la alimentación juega un rol super importante para mi, no sé cuántas calorías consumo pero sí tengo claro las que quemo y en un entrenamiento de fin de semana pueden ser en promedio 3000 calorías». ¡3000 calorías! Sin duda, es una super atleta pero además, tiene una vida social muy linda. «Soy una mujer a la que le gusta estar con su familia, que busca ese apapacho familiar, disfruto a mis sobrinas, me encanta estar con mi pareja, me gusta mucho estar cerca de ellos».
Esperen, también disfruta de correr con su equipo como recientemente lo hizo en la carrera de relevos Sal A Valle, donde con su equipo PaceMakers by DROMO, ganaron el primer lugar.
Actualmente se prepara para su próxima meta que es ¡correr 100 km! y «no sé si vaya por las 100 millas después de esta competencia, voy poco a poco. Mi sueño es hacer Mont Blanc un día y para eso estoy juntando puntos para clasificar, es como el Boston de la montaña».
Estamos seguras que lo lograrás porque al haber compartido con nosotros tu historia, nos hemos dado cuenta que tienes una gran fortaleza mental que hará que te veamos en las montañas muchos años más. Seguramente tu abuelo, quien te enseñó a tener esta relación tan especial con la montaña, está super orgulloso de ti donde quiera que esté.
¿Quieres darnos un mensaje especial Yola? «Sí, crean en su poder «. Síguela en Instagram @yola_romay