Generalmente cuando tenemos una molestia la dejamos pasar hasta que se convierte en una lesión por evitarnos gastar dinero en una terapia o masaje, cuando muchas veces la solución a nuestros problemas está en un simple rodillo. Estas son 5 molestias que puedes curar con un rodillo.
1.- Tensión en los músculos. La tensión se da por trauma o uso constante de los mismos músculos, lo que nos hace sentir la sensación de que nos pesan las piernas, poca flexibilidad o hasta dolor. El rodillo nos ayuda con presión localizada en las partes que decidamos “masajear”, ayudando así a relajar el músculo.
2.- Dolor en el arco del pie. Pasando el rodillo de adelante hacia atrás por la planta del pie, permite liberar tensión y que la sangre fluya mejor, los pies son la parte del cuerpo más alejada del corazón por lo que es importante ayudar a que fluya la sangre y se mantengan oxigenados.
3.- Mejora la flexibilidad. El rodillo se debe de alternar con estiramientos para que sea más efectivo, el punto es que uses el rodillo hasta encontrar el punto que te duele y masajear hasta que la molestia desaparezca y al final, hacer uno o varios ejercicios de flexibilidad o estiramiento.
4.- Mejora la circulación. El rodillo presiona y permite cambiar la sangre vieja por fresca, la cual trae oxígeno y glucógeno a las zonas trabajadas, trayendo consigo múltiples beneficios como un mejor rendimiento y recuperación.
5.- Prevención de lesiones. A mayor circulacion, mayor movilidad y movimientos efectivos. Además el rodillo ayuda a la mejora de la coordinación, así que las lesiones ocasionadas por movimientos mal hechos disminuyen significativamente.
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