Es verdad que las corredoras no llevamos puestos 24/7 nuestros amados tenis para correr (aunque es nuestro más grande sueño) puesto que tenemos que realizar otras actividades a lo largo de los días.
Hoy vamos a hablar de los tacones. No es nada nuevo que se consideren una de las más grande debilidades de las mujeres y cómo no lo serían si su diseño nos ayuda a alargar nuestras piernas, dándonos una apariencia más alta, delgada y sexy. Aparte de que hay muchísima variedad hoy en día, de todos los colores, tamaños y precios.
Pero ¿qué pasa con nuestros pies cuando los usamos? ¿son buenos para nuestra salud? ¿dañan nuestros pies? De seguro has escuchado que al usarlos en periodos largos y constantes pueden causar un daño grave a la larga.
Normalmente cuando apoyamos nuestro pie descalzo, este lo soporta en dos regiones del pie, el metatarso (parte delantera del pie) y el talón (la parte posterior del pie), cada una soportando la mitad de nuestro cuerpo corporal. (50%-50%). Cuando usamos tacones la parte posterior del pie se eleva y ¿qué pasa?
La distribución de nuestro peso empieza a ser desequilibrada, la parte delantera del pie soporta la mayor parte de nuestro peso, y mientras más alto el tacón mayor desequilibrio. Y para compensarlo la parte posterior se contrae y por eso que a veces nos duelen la pantorrilla (gemelos). Esto, en exceso, podría causar problemas en tus pantorrillas, cadera y espalda baja.
Además provoca que nuestra postura cambie y si se usan con frecuencia, también daña a nuestros talones, espalda, rodillas, cadera, columna además de cansancio y un dolor de pies al final del día. Si padeces fascitis plantar es mejor que busques un calzado con soporte en el arco porque si usas tacones con frecuencia, puedes crear mayor tensión en tus pies. Por todo esto, la biomecánica de tu carrera cambia.
Esto pasa en nuestro cuerpo y aun sabiendo eso quizá sea inevitable que los sigas usando, por eso te damos algunas recomendaciones para que no sufras y el daño sea menor.
- Trata de no usarlos diario, ni de usarlos por periodos de tiempo largos; darle un descanso a tus pies será la llave maestra para evitar molestias.
- Elige tu talla correcta, enfocándote en que el largo y ancho sean correctos ya que elegir unos muy apretados o unos muy agudos, el sufrimiento será aún mayor casi siempre nos olvidamos de ellos. Es importante que al final del día le dediques unos minutos a consentirlos. Puedes utilizar cremas especiales, agua caliente, un rodillo para masajes, etc.
- ¡Dales masajes a tus pies!, casi siempre nos olvidamos de ellos. Es importante que al final del día le dediques unos minutos a consentirlos. Puedes utilizar cremas especiales, agua caliente, un rodillo para masajes, etc.
¡No olvides cuidar muy bien tus pies ya que te han llevado tan lejos y lo harás aún mejor con un cuidado constante!
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